" El tiempo transcurría lento mientras el pincel recorría la superficie del lienzo ya húmedo de pintura. Mi madre no dejaba de acariciarme el pelo y yo, hipnotizado, me abstraía igual que mi padre ante su propio cuadro. En un momento dejó el pincel, se dio la vuelta y nos miró. Creo que fue lo más parecido que le vi alguna vez a una sonrisa. No me dijo que me fuera a la cama, por supuesto. Mi padre nunca decía esas cosas, de las que solía ocupar ella. Le pasó el brazo por los hombros y los tres contemplamos el cuadro que, aunque no lo supiéramos, tanto tendría que ver en nuestras vidas."
Novela de Santiago Pajares.
El libro tiene HUELLA
Deja HUELLA
Abstracción (Veladura 1) M. Seara
Precioso, las huellas nos dejan sentimientos, mas allá de las distancias y los reflejos, esos reflejos del alma.
ResponderEliminarGracias por tu visita y por dejar tu huella.
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